Tuesday, March 15, 2016
capitulo 39
Minutos después, cuando ya estuvieron más calmados, le oyó decir:
-¡Dios mío, estamos locos! Nos vamos a helar...
Los ojos de Lali estaban cerrados y sus manos acariciaban el pelo de Peter, mientras saboreaba ese momento de tenerle tan cerca.
Peter se levantó, recogió su ropa y comenzó a vestirse, mientras, Lali hacía lo mismo. Pero ella estaba tan
temblorosa, que él tuvo que ayudarla a vestirse.
-Estás temblando -dijo Peter, ayudándole a ponerse la chaqueta.
Sí, temblaba, pero no era por el frío.
-Gracias -contestó Lali.
Peter le acarició las mejillas y se la quedó mirando. Se inclinó y besó sus labios, con un beso tan tierno,
que a Lali le dio un vuelco el corazón.
-Eres el sueño de cualquier hombre -le dijo Peter-. Una señorita en público y una gata salvaje en la cama.
Lali se sonrojó y Peter sonrió. Era una sonrisa diferente a la anterior. Pero sólo duró un instante.
-¡Dios mío, lo hemos hecho en medio del camino! -dijo Peter mirando el lugar donde habían estado
tumbados.
Lali se sacudió las hojas del pelo con manos temblorosas.
-Nos echarán de menos, Peter.
-Tú eras la que quería un bebé -dijo Peter mirándola con sarcasmo-. Yo sólo trato de hacerte un favor.
Lali se dio la vuelta, sintiéndose de nuevo vacía.
-Entonces, ¿sólo fue por eso? -preguntó Lali-. Pensé que habías dejado a un lado a Crystal y habías
venido a mí buscando alivio.
-¿Por qué piensas que no podría hacerlo con Crystal? Tú sabes que no le importarían mis cicatrices en la
oscuridad.
-Entonces, ¿por qué no lo intentas? -dijo Lali con una sonrisa fría-. A ella le gustan los hombres con
dinero.
-Eso es asunto suyo. Olvida lo que dije de llevar tus cosas a mi habitación. No podrás cortarme las alas.
Lali tenía ganas de estallar. Intentó controlarse y se subió al caballo agarrando las riendas con fuerza.
-De acuerdo -dijo Lali-. Prefiero dormir sola, a lo mejor roncas.
Antes de que Peter pudiera decir nada, Lali se fue al galope. No podría aguantar ningún sarcasmo más de
él, ni ninguna amenaza respecto a Crystal. Estaba demasiado dolorida.
Capítulo Ocho
Esa noche, a la hora de cenar, todo transcurrió como en los viejos tiempos. Lali comía mientras Crystal era el centro de atención.
Su hermanastra estaba encantadora y Peter estaba reaccionando a todo ese encanto como si estuviera
ciego.
-¿Quieres un poco de pan, Lali? -le preguntó Katy.
-No, cariño. Gracias.
-Papá no se puso furioso porque fuiste a montar a caballo con vestido, ¿verdad? -¡Oh, no! -susurró Lali y puso toda su atención en la comida.
Subscribe to:
Post Comments (Atom)
No comments:
Post a Comment