Peter apoyó sus manos contra la pared del ascensor para evitar que se escabullera y Lali sintió cómo la excitación hacia presa de ella. Todo lo que le importaba en esos momentos era la exquisita sensación de su sensual boca sobre la de ella. Estaba en el séptimo cielo cuando se empezaron abrir las puertas. Lali lo apartó. De repente, Benjamin apareció a lo lejos.
-Tengo que irme... Benjamin me espera.
Pero cuando estaba a punto de salir del ascensor, Peter la detuvo.
-¿Qué haces con él? -preguntó enfadado. Lali intentó zafarse.
-¡No es asunto tuyo!
-¡Suéltala! --exigió Benjamin.
Lali vio cómo los guardaespaldas del cantante salían con agresividad del coche.
De repente, fue consciente del peligro, eran tres hombres fuertes contra uno. -¡Peter, vuelve al ascensor!
La soltó.
-Tú no te metas -replicó Peter.
Ella se puso delante de él.
-Si le pegas, nunca te lo perdonaré -se dio la vuelta para mirar a Benjamin-. ¡No quiero que os dejéis llevar por vuestra patética masculinidad!
-¡No voy a quedarme parado mientras veo cómo maltrata a una mujer embarazada! -le gritó Benjamin-. Es un hombre fuerte, puede defenderse él solito.
El enfado de Lali desapareció cuando oyó a Benjamin mencionar el embarazo. Se quedo estupefacta y miró al cantante con rabia.
-¿Estás embarazada? -Peter estaba atónito. Agarró a Benjamin de la muñeca e intentó llevar-
lo hacia el coche.
-Venga, vamos... -le pidió Lali.
-¿Es mío? -murmuró Peter.
Entonces, Benjamin se dio la vuelta y se dirigió hacia él. Todo pasó tan rápidamente, que no pudo detenerlo, y vio cómo Peter le daba un puñetazo.
-¡Parad!... ¡Parad de una vez!
Peter se quedó quieto un momento, y Benjamin lo aprovechó para devolverle el golpe.
Se metió en el coche. No podía dejar de pensar en las últimas palabras de Peter «¿Es mío?»¿Cómo podía haber dicho eso? Se sentía ultrajada.
Poco después, Benjamin entró en el coche.
-He defendido tu honor.
Lali miró por la ventanilla. Peter los miraba fijamente desde el ascensor, estaba muy serio.
-Deberías agradecerme que te haya defendido... ¿Cómo iba yo a saber que no le habías contado nada del embarazo? Supuse que era una de las principales razones por la que querías verlo...
-Me lo dijeron esta mañana, ni siquiera había pensado en decírselo todavía... Pero después de lo que ha dicho, me alegro de no haberlo hecho.
-Yo no le daría importancia... Estabas conmigo y a él no le gustó nada, cualquiera hubiera sospechado.
-¡Dios mío! ¡Ahora resulta que lo defiendes!
–Y a propósito, ¿cómo pudiste estar cariñosa con él?
Lali se sonrojó.
-Tenía pintalabios en la boca.
necesito massss
ReplyDeletemasssssss
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