Wednesday, January 20, 2016
capitulo 27
-¡Ni en sueños! -exclamó, y colgó. A los pocos instantes volvió a sonar, pero ella lo
desconectó. También ignoró el timbre de la puerta.
Permaneció adormilada el resto del día, hasta que por fin despertó. Le costaba
mucho respirar y le dolía enormemente la cabeza. Empezó a pensar que necesitaba un
médico, y mientras lo hacía el timbre de la puerta no paraba de sonar.
Salió de la cama, pero las piernas le fallaron y cayó al suelo. Se le saltaron las
lágrimas mientras se arrastraba, intentando recordar dónde estaba el teléfono. A lo
lejos oyó como si algo se rompiera, cristal quizá, y después el murmullo de unas voces.
¿Acaso se habría dejado la televisión encendida? Reunió las pocas fuerzas que le
quedaban para seguir avanzando, pero, de repente, fue como si el suelo se
desvaneciera.
Oyó una voz masculina que ya le era muy familiar decir algo en una lengua
extranjera, y vio un par de pies a su lado. Sintió que alguien la levantaba y empezaba a
sacudirla.
-¡Estás llena de... granos! -exclamó Peter en el colmo de la incredulidad.
-Vete... -murmuró Lali.
-Tienes una pinta de lo más raro. Yo creía que sólo los niños tenían varicela
-comentó Peter casi acusadoramente.
-Déjame sola... -empezó a decir Lali, pero se quedó sin fuerzas para continuar.
Sin hacerla el menor caso, Peter fue al dormitorio en busca del edredón y la
envolvió en él.
-¿Qué estás haciendo? -gimió, incapaz de hacer el menor movimiento para
impedírselo.
-Iba de camino a mi casa de campo para pasar allí el fin de semana. Pero ahora
parece que tendré que quedarme en la ciudad y lIevarte al apartamento -dijo Peter
sin el menor entusiasmo ante semejante perspectiva y, sin más preámbulos, la levantó
en brazos.
Aunque estaba muy débil, Lali tenía tan arraigada en su cerebro la idea de que
no quería tener nada que ver con aquel hombre, que de inmediato fue como si se
encendiera un timbre de alarma en su interior.
-No... tengo que quedarme aquí y cuidar de la casa.
-Y a mí me gustaría que lo hicieras, pero no puede ser.
-Se lo prometí a Liz... se ha marchado y tiene miedo de que entren a robar...
bájame..
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Jaja este Peter es un desubicado como le habla!!!!!jajaja
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