capitulo 42

— Quieres sangre, ¿no? ¡No voy a darte a Alegra! ¿Qué tipo de hombre eres? Amo a mi hija, y ella me ama. Todo el dinero del mundo no sería compensación para Alegra, a cambio de perder a su madre. — Si no estás preparada para desistir de ella, y crees que Alegra quedaría emocionalmente perturbada con esa separación —dijo Peter — entonces no tengo otra alternativa que ofrecerte un hogar a ti también. — ¿Cómo? —Lali no podía creer lo que oía. — Llevar el caso al Tribunal sería una experiencia desagradable para todos, en especial para Alegra. Y, aunque la razón estuviese de mi parte, podría perder. Un extranjero en el tribunal británico, un padre procesando una madre... Mis abogados no tendrían mucha oportunidad de vencer. — ¿Tus abogados? —Lali susurró. — Claro que un hombre en mi posición buscaría orientación legal. Puedes imaginarlo, ¿no? Estoy bien firme en la decisión de tener a Alegra. — Lo veo. — Por lo tanto, acogerte a ti y a Alegra sería la mejor alternativa, desde el punto de vista de la niña. A Lali le llevó un mínimo treinta segundos absorber lo que Peter dijo. — No entendí bien lo que quieres decir —ella declaró. — Si me casara contigo, tendré todo el tiempo del mundo para conocer a mi hija. Y Alegra usufructuaría el beneficio de tener un padre y una madre. — ¿Si tú te casas conmigo? —Lali repitió con una voz que, hasta para ella, pareció extraña. — Además, Alegra tendría mi apellido. Eso es muy importante para mí. Viviría en mi casa. Eso también es importante para mí. Y tendría a su madre —Peter enumeraba todas esas ventajas., fríamente. Pero no mencionó que, tener la madre de Alegra cerca de él, era importante también. — Pero... —Lali comenzó a hablar, y Peter no la dejó continuar. — No puedes vivir conmigo sin casarnos, no con Alegra viviendo con nosotros. Sería considerada una hija ilegítima, y no quiero que eso pase. Lali estaba horrorizada. ¿Cómo podía Peter proponer un casamiento como negocio, siendo Alegra el premio de ese mismo negocio? Conocía a Peter. Se cortaría el cuello antes de ofrecerle casamiento en términos normales. No quería casarse. Pero, si el casamiento era el único medio de obtener a Alegra, lo haría.