Wednesday, December 23, 2015
capitulo 80
— Eso de no querer al hermano pasa en muchas familias —susurró
Lali.
— Pablo fue un bebé enfermo, mimado por mi madre. Siempre lo
protegí cuando éramos niños. Pero, cuando creció, sólo dio problemas a
Industrias Lanzani. Y sé que Pablo me odiaba y me envidiaba.
— Espero que ahora no sea más parte de la directiva de las Industrias.
— Lo saqué seis meses después de despedirte. Le creé una firma para
que me dejase en paz. En cuanto a tu, cuando te encontré de nuevo, me porté
como un animal. Tenía tanto miedo que me hicieras pasar por idiota una vez
más, que perdí los estribos. Mi comportamiento fue tan condenable como el de
Pablo, y...
— Por favor, no digas eso. Nada de lo que hagas puede ser comparado al
comportamiento del irresponsable de tu hermano.
— Actué como un maníaco. Te quería de regreso a cualquier precio.
¡Como siento haber destrozado tu vida!
— Fue Pablo quién destrozó mi vida, no tú. Entiendo que las evidencias
que tuviste en tus manos contra mí eran bastante convincentes...
— Eso no es disculpa. Todo lo que hice estuvo mal. ¡Imagino como debes
haberte sentido al ser echada de Industrias Lanzani inmediatamente después
de la noche que pasamos juntos!
— Más ó menos de la misma manera que te sentiste cuando Pablo te
mostró los documentos. Me sentí destrozada.
— ¿Y cuándo descubriste que estabas embarazada? ¿Cómo te sentiste?
— Multiplica eso por diez.
— ¿Cómo puedes bromear con un asunto tan serio, querida?
— ¡Ya hace tanto tiempo! Y ahora sé que intentaste encontrarme, aún
creyendo que te había traicionado.
— Pero cuéntame, querida, ¿cómo manejaste lo del embarazo?
Ella le contó los detalles, pero sin involucrarse mucho emocionalmente.
Preferiría que Peter no le hubiese preguntado sobre eso, pues él ya estaba
sufriendo mucho. Cuando Lali terminó, Peter susurró:
— La cicatriz... ¿fue... en el parto de Alegra?
— Si.
— Cuéntame como pasó todo.
— ¿Por qué, Peter?
— Yo debía estar a tu lado. Podrías haber muerto.
— Que tontería. Es un procedimiento muy común. Ni siquiera precisé
anestesia general.
— ¿Cómo?
— Estaba conciente cuando Alegra nació.
— ¿Conciente? Dio... pero eso es medieval.
Perturbado, Peter se desmayó, cayendo sobre la alfombra persa.
Subscribe to:
Post Comments (Atom)
No comments:
Post a Comment