Thursday, September 24, 2015

capitulo 5

Era una cobarde. Tal vez, si no lo hubiera sido, Peter no se habría casado con Suzanne para empezar y no estaría ahora tan triste.
Lali tragó saliva y se limpió las palmas de las manos en los vaqueros, suspirando aliviada al comprobar que estaban llegando a su casa. Llegar a casa pondría fin al incómodo silencio que se había hecho entre ellos.
Al llegar, Peter aparcó frente a la casa amarillo pálido y apagó el motor.
—¿Quieres que te acompañe a la puerta?
Teniendo en cuenta que Lali estaba a dos segundos y diez pasos de la puerta, la oferta resultaba educada, pero innecesaria.
—No, gracias. Tengo que ir a ver al ganado antes de meterme en la cama —contestó desabrochándose el cinturón y abriendo la puerta.
Una vez fuera, se sorprendió al ver que Peter había bajado también de la furgoneta y avanzaba hacia ella.
—¿Qué haces? —le preguntó sorprendida.
—Te voy a ayudar con el ganado.
—No hace falta, no te preocupes, ya puedo yo sola —contestó Lali.
Aunque no era su pasatiempo preferido, había crecido mullendo los establos y cepillando a los caballos y, junto con varios empleados, seguía ayudando a su padre con los quehaceres cotidianos del rancho.
Ir a mirar que los caballos tuvieran agua y dejarles un poco de cebada para la noche no era ningún problema.
—Ya sé que puedes tú sola, pero lo harás más rápido si te ayudo —insistió Peter pasándole el brazo por los hombros.
Lali decidió que era absurdo discutir con él porque lo que había dicho tenía lógica, así que avanzaron hacia los establos. Una vez allí, Lali encendió las luces y ambos se pusieron manos a la obra.
Peter había pasado tanto tiempo de pequeño en el Double D que sabía dónde estaba todo. Los caballos se pusieron en pie al sentir su presencia y Peter los fue acariciando al pasar.
Mientras Lali ponía agua a los caballos y se aseguraba de que todos tuvieran comida, Peter sacó una bala fuera para dejarla en el campo para las vacas.
Terminaron casi al mismo tiempo.
—¿Ya está todo? —le preguntó Peter a Lali.
—Casi —contestó Lali agarrando una escalera de mano y apoyándola contra la pared—. Hay una camada de gatitos arriba y quiero subir a ver qué tal están.
Dicho aquello, subió por la escalera buscando a los mininos con cuidado pues la luz allí arriba era mucho más débil que abajo y apenas veía.

3 comments: