La puerta de la biblioteca estaba abierta, cuando Peter llegó. Su madre estaba sentada en uno de los sillones situados delante de la chimenea, tomando una copita de jerez con la mirada puesta en las llamas que bailoteaban en el hogar. Peter cerró la puerta tras él, se acercó al aparador y se sirvió una copa antes de hablar con su madre.
—¿Querías hablar conmigo? —le preguntó, reclinándose en el otro sillón.
La reina fue directa al grano. Típico de ella.
—¿Qué hace esa chica aquí, Peter?
Él no fingió no comprender.
—Como ya os he dicho en la cena, la he contratado para que colabore con los organismos benéficos de la isla. Es muy buena en su trabajo y creo que nos será de gran ayuda.
—Y ésa es la única razón —dijo su madre brevemente, observándolo por encima del borde de sus gafas—. ¿Nada más?
Peter bebió un sorbo de su brandy, antes de contestar.
—¿Qué otra razón habría de tener?
—Vamos, Peter. Puede que sea tu madre, motivo por el cual no sería a mí a quien acudirías en primer lugar para confiarle tu vida amorosa, pero estoy perfectamente al corriente de tus… pasatiempos. ¿Estás seguro de que no la has traído aquí para convertirla en tu próxima conquista?
Aunque sus relaciones íntimas no incumbían a nadie más que a él, le costaba, además de ser una enorme insensatez, decirle a la reina que se metiera en sus propios asuntos. Aunque fuera su madre.
De modo que hizo lo que tanto él como sus hermanos habían hecho innumerables veces cuando eran niños: mirarla a los ojos y mentirle.
—Claro que no. Me tomo muy en serio mis responsabilidades hacia mi país. En cuanto vi lo que Lali había hecho, en la gala a la que asistí durante mi estancia en Estados Unidos, supe que sería de gran ayuda para nuestras causas benéficas.
Su madre entornó los ojos un momento, como calibrando la sinceridad de sus palabras.
—Me alegra oírlo. Estoy segura de que comprenderás, que no nos haría ningún bien que se hicieran públicos tus pequeños devaneos, tan cerca de la fecha en la que se anunciará tu compromiso. Los dos sabemos que no te has mantenido célibe, desde que te comprometiste a casarte con la princesa Paula. Pero es importante que guardes las apariencias y no hagas nada que pueda molestar a su familia. Este matrimonio servirá para forjar una importante alianza entre su país y el nuestro.
Peter le hubiera dicho que si quería acostarse con lali y que no le importa el compromiso con paula
ReplyDeleteotroo
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