Sunday, December 13, 2015

capitulo 76

—Dime que me amas, Lali, tanto como yo te amo a ti. Dime que vendrás conmigo a Glendovia, que te casarás conmigo y serás mi princesa. Mi esposa. Las pestañas de Lali se estremecieron, mientras trataba de absorber toda aquella información. La determinación de Peter, su declaración de amor, su disposición a anteponerla, a todas sus responsabilidades hacia la familia real y su país. Tenía muchas preguntas que hacerle, pero cuando abrió la boca, sólo consiguió decir una cosa. —Te amo —murmuró, rodeándole los hombros con los brazos y pegándose a él con todo su ser—. No me habría dolido tanto abandonar Glendovia de no ser así. La boca de Peter se curvó en una suave sonrisa. —Me alegra oírlo. ¿Significa eso que serás mi esposa? Lali sintió como se le llenaba el corazón de alegría. Lo único que deseaba era decirle que sí y cubrirlo de besos, pero el miedo la hizo retraerse. Tenía que asegurarse de que aquello no sería un error que pudiera amargarles la existencia. —¿Y qué pasa con tu madre? —preguntó—. No creo que sea necesario que te diga lo poco que le gusto y lo mucho que se enfadó cuando vio aquellas fotos en los periódicos. Imagino que no le hará ninguna gracia saber que me has pedido que me case contigo. —Los problemas que tenga mi madre son asunto suyo, y tendrá que aprender a vivir con ellos. Lo que importa es lo que yo siento por ti, y puedo decirte sin temor a equivocarme que te adoro. Esta vez sonrió de oreja a oreja y se detuvo un momento para besarla en los labios. —Y quiero que sepas que al resto de mi familia también le gustas. Me apoyaron al cien por cien, cuando les dije que pensaba venir a buscarte. También mi padre, y te aseguro que hará todo lo que esté en su mano para convencer a mi madre. —¿Estás seguro? —preguntó Lali con un hilo de voz—. No quiero hacer nada que pueda herirte o causarte problemas con tu familia o con tu país. —No podría estar más seguro —respondió él con total determinación, para gran alivio de Lali—. Renunciaría a mi título por ti, y si me pides que lo haga, lo haré. Tú eres lo único que quiero y haré todo lo que tenga que hacer para tenerte. Lali no sabía si reír o llorar de puro gozo. —¿Podrías llevarme a un hotel, uno que no tenga balcones, y hacerme el amor? Los ojos de Peter resplandecieron peligrosamente y la estrechó aún más fuerte. —Las obligaciones de un príncipe nunca tienen fin —murmuró, un segundo antes de inclinarse y besarla. Fin

4 comments: