Wednesday, February 3, 2016
capitulo 87
Sin hacer el menor caso a la apurada recepcionista, atravesó como una
barahúnda el pasillo que conducía hacia el despacho de Peter, y entró sin llamar
siquiera, cerrando la puerta de un golpazo.
De pie, en el centro de la estancia, él la miró con expresión de desaliento.
-He venido para decirte un par de cosas antes de salir de tu vida para siempre.
-Lali... -Peter dio un paso hacia delante.
-¡No me interrumpas cuando te estoy hablando! ¡Y ni se te ocurra volver a
pronunciar mi nombre! ¡Ni te imaginas cómo me sentí al verte en esa maldita foto con
Natalie Cibaud!
-Sí, me lo imagino, pero tienes que saber que nos la hicieron hace tres meses
-replicó Peter.
-¡No te creo!
-Puedes llamar a mi abogado si quieres. Acabo de hablar con él para ordenarle
que demande a ese periódico.
A Lali empezaron a temblarle las piernas de tal modo que tuvo que apoyarse en
la puerta.
-¿Me estás diciendo que no pasaste la noche con Natalie Cibaud? -preguntó.
-Lali, te aseguro que no he vuelto a verla desde el día que te pusiste enferma...
No acabamos precisamente como buenos amigos, la verdad...
-Pero yo suponía que la habías estado viendo después... -Lali estaba ya
temblando de pies a cabeza.
-Pues te equivocaste. Ni siquiera he vuelto a hablar con ella; de hecho, creo que
ni siquiera está en el país. Lali, deberías saber mejor que nadie que, desde que estoy
contigo, no he vuelto a mirar a ninguna otra mujer -le dijo Peter abrazándola-. No
hay ninguna que se te pueda comparar. Casi me volví loco cuando me di cuenta de que
ibas a ver esa foto; habría hecho lo que fuera por evitarte el disgusto, agape mou.
-Lali se lo quedó mirando extasiada-. Hay tantas cosas que quiero decirte...
-continuó Peter- pero hay alguien que está deseando verte, y no deseo hacerle
esperar más: Lali, está aquí tu padre...
-¿Mi... mi padre? -tartamudeó incrédula-. ¿Aquí?
-Contraté a unos detectives para que lo buscaran, y hace poco me avisaron de
que le habían encontrado -le explicó-. Se me ocurrió Ilevarle ayer a casa para darte
una sorpresa -cariñosamente, hizo que se sentara en un sillón para que fuera
asimilando aquella inesperada noticia.
-Dime una cosa antes de continuar -le preguntó ansiosamente-, ¿te ha pedido
dinero?
-No, nada de eso. Está realmente arrepentido, Lali. Encontró un trabajo y está
procurando rehacer su vida, aunque él mismo me ha confesado que todavía tiene que
hacer muchos esfuerzos para resistir la tentación de volver a su antigua vida.
Se le llenaron los ojos de lágrimas al ver que su padre aparecía en la puerta mientras Peter se retiraba discretamente. Parecía más viejo de lo que recordaba, y
había perdido algo de peso.
Subscribe to:
Post Comments (Atom)
No comments:
Post a Comment