DOS DÍAS después, mientras estaba tumbada sobre una plataforma sobre la laguna, Lali acariciaba suavemente la transparente agua entre los dedos.
Le parecía que las Maldivas eran un paraíso terrenal. Aquella laguna estaba rodeaba de una profusa vegetación y el cielo era de un intenso color azul, sin nubes. La arena de la playa era blanca y se mezclaba con el azul turquesa del mar. Su magnífica villa estaba en una pequeña isla para asegurar una intimidad total, aunque Peter la había informado de que había lugares más habitados a muy poca distancia.
—¿Qué es tan fascinante? —le preguntó Peter, mientras se agachaba a su lado.
—La laguna es como una piscina gigante. Me hace recordar cuando yo era una niña y mi tía me llevaba a la playa.
—¿Y no tus padres?
Lali se incorporó y miró a su marido. Solo habían pasado tres días de su luna de miel, pero el corazón seguía latiéndole con la misma intensidad cada vez que tenía a Peter cerca.
—Mi padre no podía alejarse nunca de la granja.
—Debes de echar mucho de menos a tus padres.
—Sí, pero espero que ya no será por mucho tiempo.
—No te entiendo.
—Cuando llevemos casados un par de meses, se lo diré a mis padres y entonces podremos ir a visitarlos, De ese modo, no harán preguntas incómodas sobre cuánto tiempo llevamos casados.
—Entonces, ¿tus padres están vivos?
—¿Y por qué no lo iban a estar?
—Había creído que habían muerto. Cuando nos conocimos, me dijiste que no conocías a nadie.
—¡Pero no te dije que estuvieran muertos!
—¡Ni siquiera hablaste de la posibilidad de invitara tus padres a la boda! ¿Cómo no iba a pensar que habían fallecido?
—Mis padres sufrieron mucho cuando me quedé embarazada. Me enviaron a vivir con una tía que tengo en Manchester. Se suponía que yo debía dar a mi hijo en adopción y luego regresar a mi casa, pero cuando nació, no pude hacerlo... Así que me quedé sola.
—¿Cuándo hablaste con tus padres por última vez?
massss :)
ReplyDeletenecesito mas
ReplyDeletemas ♥
ReplyDeleteseguilaaa
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