Wednesday, February 3, 2016

capitulo 90

-¿Encontraste mi lista? -Lali estaba pasmada. -¿Cómo fuiste capaz de escribir semejantes cosas de mí? -¿Y cómo es que sabías que me refería a ti? No había ningún nombre que yo recuerde -Lali se quedó callada unos instantes, sin saber muy bien qué decirle-. ¡Oh, Peter! -murmuró al fin-. Te tuvo que sentar fatal... -Bueno, la verdad es que me fue de mucha ayuda para saber lo que debía corregir. Quería convencerte de que no era el hombre que tú creías que era. -La verdad es que has mejorado mucho... Peter la estrechó con más fuerza, besándola apasionadamente. Lali le respondió en la misma medida, y cuando por fin se separaron, recostó la cabeza en su hombro. -¡Cariño! Qué tonta fui al creer que todo lo que pretendías de mí era pasar un buen rato en la cama... Abrazados se reunieron hacia la multitud de invitados que les estaban esperando. Lali iba con la cabeza muy alta; se sentía tan feliz que se prometió a sí misma que jamás le confesaría que el numerito del avión le había parecido la cosa más cursi que había visto en su vida... sobre todo teniendo en cuenta lo satisfecho que se sentía de sí mismo porque se le hubiera ocurrido semejante idea. -Yo también te quiero -le murmuró al oído-. No debería decírtelo, pero no tiene nada que ver con lo bondadoso que te has vuelto... Ya estaba loca por ti antes incluso de escribir esa dichosa lista. -¿Cómo te atreves a decirme esto delante de toda esta gente? -le regañó Peter burlonamente. Sin embargo, le sonreía a la vez con una inmensa ternura-. Atención todos, quiero presentaros a mi esposa -anunció, con tal orgullo y placer que Lali se sintió a punto de estallar de alegría. Su felicidad no se vio empañada siquiera cuando vio entre la multitud que se acercaba a felicitarlos la inconfundible cabeza de Leland Coulter. -Lo lamento -murmuró avergonzado el anciano cuando llegó a su altura. -Por supuesto que lo lamenta -añadió en voz alta Jennifer-. Ahora todo el mundo sabe lo que hizo. Yo me he encargado de que así sea. -Me da un poco de pena -le confesó Lali a Peter cuando perdió de vista a la infeliz pareja. -¡Ni se te ocurra decir eso! -replicó su marido, implacable-. Por su culpa hemos perdido tres años preciosos. -Me parece que entonces era demasiado joven e inmadura... -Yo te hubiera enseñado rápidamente -gruñó Peter. Con inmensa alegría, Lali distinguió entre los invitados a su buena amiga Liz, acompañada de Bounce. -¡Has venido! -exclamó. -Peter me llamó anoche. Nos han traído en limusina, ¿qué te parece? Bounce estaba de lo más impresionado -bromeó-. Bueno, ¿no te había dicho yo que este hombre estaba enamorado de ti? ...Ejem, espero que no esté escuchando...

No comments:

Post a Comment