Monday, May 25, 2015

capitulo 30

Lali estuvo a punto de estallar en carcajadas, pero se había quedado tan sorprendida, que no consiguió articular palabra.
-Estás loco... -dijo por fin.
-No, no lo estoy. Vivimos en una comunidad que no es muy liberal y tú has crecido en una casa en la que el sexo fuera del matrimonio es completamente inaceptable. Entiendo perfectamente que estés dolida por lo que ha pasado entre nosotros hoy y tienes derecho a estarlo. Me he aprovechado de tu confianza y de tu vulnerabilidad y no me enorgullezco de ello en absoluto.
-Pero pedirme que me case contigo...
Lali estaba completamente anonadada ante el cambio de actitud de Peter. Ahora comprendía por qué la había tratado con tanto cariño en la cama. Obviamente, estaba pensando en Paula.
-¿Por qué no? Algún día me tendré que casar con alguien.
-Sí, pero no creo que quieras hacerlo con cualquiera -contestó Lali.
-Tú eres guapa.
Lali se sintió fatal, le pareció una ignominia que la apreciara solamente por sus encantos físicos, pero no debía olvidar que, obviamente, eso era lo único que le había atraído de ella.
En cualquier caso, si le hubiera dicho la verdad, si hubiera confesado que era virgen, Peter jamás le habría hecho el amor, así que de nada servía echarle toda la culpa a él porque ella también tenía su parte de responsabilidad en lo ocurrido.
Peter le estaba pidiendo que se casara con él porque se sentía culpable y ella no estaba dispuesta a ser tan indecente como para aceptar una propuesta tan importante en aquellas condiciones.
-Lo mejor será que nos olvidemos de todo esto -le dijo-. No me debes nada. No te culpo de nada. No hace falta que me propongas que me case contigo.
-Claro que hace falta -insistió Peter.
-Gracias por la oferta. No quiero parecerte maleducada, pero creo que no es difícil de entender que no me quiero casar con un hombre que no me ama.
-¿Es tu última palabra?
-Sí -contestó Lali-. ¿Me puedo ir?
-Haz lo que quieras -contestó Peter.
Acto seguido, Lali salió a toda velocidad de su habitación y Peter se quedó allí, de pie, confuso. Ni por un segundo se le había pasado por la cabeza que Lali fuera a rechazar su propuesta.
Ahora, en lo único en lo que podía pensar era en que jamás volvería a tenerla en su cama.
Lali acababa de salir a la galena cuando se encontró con Cande.
-¿Dónde te habías metido? Te llevo buscando un buen rato -le dijo su amiga-. Por lo visto, ha desaparecido una joya y nos están haciendo abrir las taquillas a todos.
Lali siguió a Cande hasta los sótanos, donde tenía las taquillas el personal de limpieza y, mientras la señora Cook, la jefa de personal, las abría una detrás de otra, no podía dejar de pensar en Peter.
¿Qué habría pasado si hubiera aceptado su propuesta? ¿De verdad se habría casado con ella? No parecía muy propio de un príncipe pedir algo que luego no fuera a estar dispuesto a cumplir. Entonces, ¿se habría convertido en princesa? ¿Habrían sido felices? ¿Se habría olvidado de Paula y habría terminado enamorándose de ella?
-Lali, ¿podríamos hablar? -le dijo la señora Cook tras el registro.
A continuación, mientras Lali seguía a la jefa de personal a su despacho, se hizo un incómodo silencio.

No comments:

Post a Comment