Thursday, May 14, 2015

capitulo 1 y 2

—Antes o después tendrás que casarte con “alguien” —señalo Nicolas Lanzani—. ¿Por qué no Lali Esposito?
Peter no contesto. En otro momento de su vida se habría reído a carcajadas si su padre le hubiera sugerido un matrimonio de conveniencia. Pero llevaba casi 2 años sumido en un infierno de dolor, del que solo escapaba enfrascándose en el trabajo. En un intento desesperado por llenar el vacío que lo asolaba, había tenido múltiples aventuras, pero esas relaciones sexuales tan solo le habían dejado un regusto amargo.
—Es un honor que Alejo Esposito haya penso en nuestra familia para su hija — continuo Nicolas con persistencia, observando a su impredecible hijo—. Tiene muy buena opinión de tu visión para los negocios y le preocupa su salud. “Necesita“ un yerno en quien confiar.
Peter, escucho con escepticismo el astuto discurso de su padre, que parecía sugerir que un matrimonio concertado por la familia, en vez de por los interesados, fuera habitual en Grecia, aunque ya no lo era en absoluto. Además, le asombraba que el interés demostrado por uno de los hombres más ricos del mundo hubiera cegado a su padre, haciéndole olvidar otras cosas mucho menos agradables.
—Alejo Esposito es un malvado y un matón. Tu lo sabes y yo también.
—Aún así su hija Lali es una joven decente y bien educada —siguió Nicolas con determinación, convencido de que solo un matrimonio como ese podría apartar a su hijo de la vida de fiestas y escándalos continuos que estaba destrozando el corazón de su madre—. No veo razón que impida que, con el tiempo, seas feliz con ella.
El rostro delgado y poderoso de Peter se contrajo con un rictus de amargura. Desde que Candela, a quien había amado por encima de todo, se había ido para
siempre, no se creía capaz de ser feliz con mujer alguna. Decidió no mencionar ese tema, porque su padre no era hipócrita y no se callaría.
Los padres de Peter, griegos y muy conservadores, habían odiado a Candela y se habían negado a aceptarla como esposa de su único hijo. Su reputación de mujer alocada y su turbio pasado ofendían su sensibilidad. Cuando se comprometió con ella la reacción de su padre fue la ira y la de su madre el llanto y Peter corto todo vinculo con ellos. El enfrentamiento había empezado a suavizarse después de la muerte de Candela, pero solo porque Peter estaba tan desesperado que era incapaz de hacer el esfuerzo de rechazar a su familia.
Sin embargo, desde entonces, cada negocio que hacia era una mina de oro. Ya era mucho mas rico que su padre porque, mientras Nicolas había heredado una fortuna y se había limitado a conservarla, Peter se había dedicado al capital del riesgo y al desarrollo de programas informáticos, olvidando la cautela. Era muy irónico que sus increíbles ganancias de los últimos meses hubieran hecho que Alejo Esposito, el magnate multimillonario, lo considerara como un posible yerno.
—Ni siquiera he visto a la hija de Alejo –dijo Peter secamente.
—Claro que sí —contradijo Nicolas—. Según Alejo, la viste cuando pasaste la noche en Lexos.
Peter frunció el entrecejo. Hacia un par de meses su yate había tenido problemas en una tormenta, cerca de la costa de Lexos y había llamado por radio para que le permitieran atracar; Alejo tenia forma de evitar de malas maneras la visita de intrusos en su isla. Aunque Peter había sido bien recibido y agasajado con todo tipo de lujos, había sido una noche espantosa.
Aunque tenía más de sesenta años, Alejo tenia un pequeño harén de bellísimas jovenes en su casa palaciega, y había invitado a Peter a elegir a una para completar la diversión de la noche. El sintió repulsión al ver lo dispuestas que estaban las aduladoras jovencitas a satisfacer los deseos del viejo. Pero Peter no había cometido el error de comentar los excesos sexuales de Alejo con nadie. Alejo Esposito era un enemigo implacable y despiadado y solo un estúpido se atrevería a provocar su ira. Peter Lanzani no quería que nada amenazara su recién creado emperio empresarial...
No creía que ninguna de las jovencitas que había visto fuera Lali Esposito. Peter soltó una carcajada seca; Alejo distaba de ser un personaje agradable, pero no estaba loco. Por más que lo pensó, no recordaba haber visto a ninguna otra mujer esa noche, excepto el ama de llaves, que lo había llevado a su suite ardiendo de ira y frustración por como se había burlado Alejo cuando se negó a dormir con una de sus prostitutas.
—Deja que refresque tu memoria —dijo Nicolas Lanzani incomodo, ya que había contado con que su hijo recordara a la joven sin tener que ver una foto.
Peter miro la foto con incredulidad y la reconoció de inmediato. Mascullo una maldición. Aunque estaba de perfil, recordó la inclinación sumisa de la cabeza, el pelo claro recogido en un moño severo y los rasgos frágiles y delicados del rostro.
—¡Creí que era el ama de llaves! —exclamo Peter indignado, pero sus pómulos se tiñeron levemente; aquella noche, a pesar de su ira, no había sido inmune al encanto natural de la joven.

8 comments:

  1. quiero saber que opina lali de ese casamiento mas

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  2. quierooooooooooooooooooooooo

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  3. masssssssssssssssssss

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  4. novelaaaaaaaaaaaaaaaaaaa

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  5. pleaseeeeeeeeeeeeeeeeee

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  6. Jajaja como la confundió con el ama de llaves ? Tan así se veía lali

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  7. Me encantoo el final d la anterior!
    Y tmb me gusra esta nuevaa
    Mass

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