Wednesday, May 13, 2015

capitulo 41 y 42

Cuando separó sus labios de él, Lali descubrió que estaba en la cama. Estaba vestida, pero le había desabrochado la cremallera del vestido. Miró a Peter. Estaba medio desnudo.
-¿Por qué te pones tan tímida? ¿Sólo haces el amor en la oscuridad?
Lali se sonrojó. Mirando aquellos ojos tan verdes, se olvidaba incluso de respirar. No podía pensar, pero sabía que no podía seguir adelante. Poco a poco, se fue poniendo en el borde de la cama.
Peter se acercó a ella, con una calma infinita y le quitó los zapatos. Su móvil empezó a sonar. Se puso en tensión. Lali lo observó alargar una mano. El sonido cesó. -¿Qué has hecho? -susurró ella.
-Apagarlo.
-¡Pero podría haber sido una llamada importante!
-Puede esperar hasta mañana.
Una noche entera en brazos de Peter. Pero era imposible pasar una noche entera con él. Porque en cuanto hubiera satisfecho su deseo, se iría a dormir a otro sitio. ¿Cómo se le podía estar ocurriendo hacer el amor con él? Aquella angustiosa pregunta no tenía una respuesta racional, por mucho que le diera vueltas en la cabeza.
-Estás muy nerviosa -murmuró Peter, frunciendo el ceño y quitándose los pantalones. -No estoy nerviosa -respondió Lali muy digna, levantándose de la cama, con la cara muy colorada. Se abrochó la cremallera-. Pero no me vendo por una cena y unos cuantos vestidos... Peter la agarró por los hombros.
-No tienes por qué asustarte de mi. No soy un bestia en la cama -le dijo, con la voz ronca-. No, si no quieres que lo sea...
La echó otra vez en la cama y Lali susurró:
-Peter...
-Tienes el corazón desbocado.
Cuando fue a ponerse una mano para comprobarlo, encontró la de él. Una mano fuerte sobre su pecho. Se estremeció.
-No.
Pero Peter le bajó las hombreras, pasando su boca por la parte del cuerpo que iba desnudando. Lali emitió un quejido cuando le quitó el vestido por completo y la puso en la cama otra vez.
-Lo haré suavemente -prometió Peter. Lali alzó los ojos y se encontró una mirada esmeralda. Una sola mirada y creyó que sus huesos se iban a derretir. Se acercó a ella, desnudo. El corazón le dio una sacudida cuando se fijó en su cuerpo. Pero cuando sintió la fuerza de su virilidad, abrió los ojos de par en par, quedándose casi sin respiración. Una fuerza desde lo más profundo de su ser la hizo reaccionar, e intentó escapar.
Peter se echó encima de ella tan deprisa, que cuando se dio cuenta estaba atrapada en una postura que desde el primer momento había tratado de evitar.
-¡Theos! -protestó Peter, cuando miró sus ansiosos y evasivos ojos-. ¡Me arrepiento de no haberle partido la cara a ese Nico! ¿Qué hacía contigo en la cama?
-¡Nada!
-No te voy a hacer daño... -Peter le pasó un dedo por su boca, mirándola con sus ojos verdosos, casi hipnotizándola-. No me importa pasarme toda la noche acariciándote -con la punta de un dedo le abrió los labios y luego lo metió en su boca, mientras ella no podía hacer otra cosa que mirarlo fijamente, perdida en sus emociones.
Peter sonrió y le pasó la lengua por el labio. Lali deseó que la besara. Era una necesidad imperiosa en aquel momento. Su cuerpo tembló de impaciencia y se puso tensa.
Levantó las manos y le agarró la cabeza.
Peter se rió y le metió la lengua entre sus labios.
-Espera... -le susurró de forma muy provocadora. Pero Lali no podía contenerse. Levantó su cuerpo hasta que encontró los labios de él, obligándole a bajar la cabeza, sin quedar satisfecha hasta que logró que la besara. Incluso después sintió que todavía no había quedado satisfecha del todo. Pero él ya había empezado a acariciarle los pechos, concentrándose especialmente en sus pezones.
Lali no pudo reprimir un quejido de placer. Peter la miró y la tranquilizó, susurrándole al oído. Fue un gesto muy sensual. Inclinó la cabeza y empezó a chuparle los pechos. Lali se quejaba y movía su cuerpo de forma incontrolada. Empezó a acariciarle todo el cuerpo con sus manos.
Peter se dio la vuelta y se la puso encima, besándola con tanta pasión que sintió como si su cuerpo fuera un barco en plena tormenta. Con una mano tiró de su pelo, obligándola a echar la cabeza hacia atrás.
-¿Quieres que paremos cinco minutos, para que te enfríes un poco?
-¿Enfriarme? -Lali repitió, casi sin aliento, como si se lo hubiera dicho en un idioma extranjero, al tiempo que sentía el vello de su pecho en sus pezones, sensación que la hizo temblar de placer. Restregó su cuerpo contra el de él.
Peter empezó a decir frases en griego mientras movía también su cuerpo. Le puso las manos en la cadera y la obligó a abrir las piernas.
-Espera -no pudo seguir, cuando sintió que le chupaba el pezón.
Le puso una mano en el trasero, para colocarla donde él quería que estuviera. Lali se estremeció, asustada al comprobar una nueva fuente de excitación, perdiéndose en el placer que le estaba dando. -Por favor... -susurró Lali.
Peter la puso de nuevo sobre el colchón y la besó, invadiéndole la boca con su ardiente lengua. Al mismo tiempo le pasó una mano por la parte interior del muslo, haciendo que cada uno de los músculos de su cuerpo se pusiera en tensión cuando sintió su dedo justo en el centro de su feminidad.
-Eres tan suave como el satén -le susurró al oído. Al sentir que la tocaban donde nunca antes la habían tocado, Lali fue incapaz de responder verbalmente. Todo su ser se concentró en la exploración que le estaba haciendo con sus dedos. El corazón le latía como si la golpearan con un martillo en su pecho. Trató de tomar aire, sintiéndose tan excitada que llegó a pensar que la estaban torturando.
Y en un momento determinado, cuando estaba a punto de agonizar, Peter entró en ella con una fuerza inusitada. Lali gritó de dolor, tan fuertemente que podría haber levantado de la tumba a un muerto, y le clavó los dientes en el hombro.
-¡Theos! -exclamó Peter, mirándola con cara de sorpresa-. Lo siento... me excitaste tanto que perdí el control.
-Yo... -intentó responder Lali, hipnotizada por su mirada.
Peter bajó la cabeza y le rozó la boca con sus labios.
-Pero es que eres deliciosa -le dijo, sin apartar los labios de su boca-. Confía en mí...
Lali se derritió como la escarcha a la luz del sol. Cuando él empezó a moverse de nuevo, ella pensó que iba a sentir lo mismo otra vez, pero un segundo después se descubrió anhelando con desesperación esa sensación que aceleraba el ritmo de su corazón.
-¿Estás bien? -le preguntó Peter.
Más que bien. Cerró los ojos y se dejó llevar por la sensación de tenerlo dentro de ella, moviéndose al unísono a un ritmo desenfrenado. Hasta que en un momento determinado su cuerpo empezó a estremecerse y juntos alcanzaron el orgasmo.
Cuando terminaron, Lali no quería que Peter se moviera, para continuar sintiendo aquella paz y tranquilidad. Le producía un placer increíble sentir el calor y el peso de su cuerpo encima.
Peter levantó la cabeza y la miró con una intensidad desconcertante.
-Te has comportado como si fueras virgen -le dijo, medio riéndose-. O por lo menos, como yo me imagino que se comportan las mujeres que son vírgenes. Se apartó de ella y saltó de la cama.

15 comments:

  1. me fasino el cap pone mas

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  2. quieroooooooooooooooooooo

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  3. masssssssssssssssss

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  4. novelaaaaaaaaaaaaaaaaaa

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  5. porfavorrrrrrrrrrrrrr

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  6. lindo cap que le pasa a peter que se levanto asi espero que no empieze con sus idioteses y que no arruine lo que paso entre el y lali con su arrogancia.

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  7. Si lali era virgen porque peter no se dio cuenta ? Con lo último q dijo esperó q no se comporte como un animal

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  8. +++++++++++++++++++++++++++++++++++

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