Peter entró en la habitación y con un gesto melodramático muy poco acorde con su carácter, tiró unos papeles sobre la cama.
—¡Eres una mentirosa! ¡Has estado en el apartamento de Gaston en numerosas ocasiones! Incluso has pasado la noche allí... ¡Llevas meses acostándote con él!
Atónita por la agresión, Lali se quedó paralizada. ¿De qué demonios estaba hablando?
—Yo nunca he estado en el apartamento de Gaston. Ni siquiera sé dónde vive...
—¿Cómo que no? Aquí tengo las pruebas —la interrumpió Peter, con los dientes apretados.
—¿Qué pruebas? —murmuró ella, tomando los papeles—. ¿Qué es esto?
—Sorpresa, sorpresa. Has estado bajo la vigilancia de un equipo de seguridad durante el último año. Ése es el informe de tus actividades re-cientes...
—¿Seguridad? ¿Quieres decir que has estado vigilándome?
—Cuidando de ti es una mejor forma de describirlo.
—¿Quién ha estado vigilándome? —preguntó Lali, asqueada por la idea de que unos extraños hubieran estado siguiendo sus pasos sin que ella lo supiera.
—Uno de mis equipos de seguridad. Profesionales que saben hacer su trabajo sin ser detectados y sin interferir con tu libertad. Ellos no cometen errores —dijo Peter, con ferocidad —, así que no pierdas el tiempo intentando mentirme.
Lali lo miró, atónita.
—Me horroriza que hayas desconfiado de mí de esa manera. Has pagado a gente para que me espiase... es horrible.
Peter tuvo el detalle de parecer ligeramente avergonzado.
—No es eso. He recibido amenazas anónimas... me preocupaba que, por tu asociación conmigo, tú pudieras estar en peligro. Era mi obligación protegerte y eso es lo que he hecho. Fin de la historia.
Lali no le escuchaba. Estaba perpleja por la revelación.
—La idea de que unos extraños me espíen es asquerosa. Yo había creído que tenía derecho a mi vida privada... pero veo que no era sí.
Peter estaba cada vez más furioso. ¿Cómo se atrevía a concentrarse en un hecho trivial e ignorar lo importante, que le había sido infiel? ¿Qué valía su derecho a la intimidad comparado con su detestable traición? ¿De dónde sacaba valor para mirarlo a los ojos con gesto de reproche?
—Hasta anoche, jamás le había pedido al servicio de seguridad que me diera un informe de tus movimientos. He respetado tu intimidad al cien por cien —le informó, cortante—. Pero quería tener pruebas de tu infidelidad. El número de visitas que has hecho al apartamento de Gaston corrobora la acusación que mi hermana hizo contra ti.
Lali seguía estudiando los papeles que tenía en la mano. Y al ver la dirección que aparecía en esos papeles, dejó escapar un suspiro. Era un ab-surdo malentendido...
peter este peter es un idiota pobre lali que deje de dar explicasiones y lo deje ir
ReplyDeletequiero saber que va a pasar
ReplyDeleteme gusto mucho el cap espero el proximo
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